Arte; Claudia Tremblay |
Trenzaré
mi Tristeza
Decía mi abuela que cuando una
mujer se sintiera triste lo mejor que podía hacer era trenzarse el cabello; de
esta manera el dolor quedaría atrapado entre los cabellos y no podría llegar
hasta el resto del cuerpo; había que tener cuidado de que la tristeza no se
metiera en los ojos pues los haría llover, tampoco era bueno dejarla entrar en
nuestros labios pues los obligaría a decir cosas que no eran ciertas, que no se
meta entre tus manos - me decía- porque puedes tostar de más el café o dejar
cruda la masa; y es que a la tristeza le gusta el sabor amargo.
Cuando te sientas triste niña,
trénzate el cabello; atrapa el dolor en la madeja y déjalo escapar cuando el
viento del norte pegue con fuerza. Nuestro cabello es una red capaz de
atraparlo todo, es fuerte como las raíces del ahuehuete y suave como la espuma
del atole.
Que no te agarre desprevenida
la melancolía mi niña, aun si tienes el corazón roto o los huesos fríos por
alguna ausencia. No la dejes meterse en ti con tu cabello suelto, porque fluirá
en cascada por los canales que la luna ha trazado entre tu cuerpo. Trenza tu
tristeza, decía, siempre trenza tu tristeza…
Y mañana que despiertes con el
canto del gorrión la encontrarás pálida y desvanecida entre el telar de tu
cabello.
Paola Klug
Arte: Claudia Tremblay |
©Paqui Sánchez
¡Qué bonito, Paqui!!!
ResponderEliminarLo había leído ya, no sé donde. Es precioso. Me haré trenzas con el pensamiento porque mi cabello es más bien corto y escaso... je je je
Feliz verano!!
Muy feliz verano querdia Maite.
EliminarPuede ser que lo leyeras en facebook, lo publiqué por allí hace mucho tiempo, pero me encontré de nuevo con el escrito y quise dejarlo también por aquí.
No te pre-ocupes porque las trenzas chiquititas también valen :) y la intención mucho más.
Un abrazo muy grande y muy feliz verano para ti también.
Besos y abrazos.