Reconectando con la energía
del dinero
Me ha llamado
la atención una y otra vez que los trabajadores de la luz o las personas que
están en su viaje del alma por lo general suelen ser pobres. Parece que tienen
muchos problemas para atraer dinero a sus vidas.
Obviamente, no
le ocurre a todo el mundo, pero es un patrón que se encuentra fuertemente
arraigado en curanderos, videntes, e incluso en los trabajadores de la
ascensión (y en todos los grupos que se interesan en los caminos espirituales).
No voy a entrar
en el por qué, ya que en el fondo, eso no es importante. Sin embargo, quiero
señalar que tendrás que trabajar con sus propios bloqueos personales que están
creando este problema en particular en tu vida. El ejercicio que vamos a hacer
más adelante te va a permitir identificar cuál es tu problema en particular,
arreglarlo y sanarlo. Después de aprender este ejercicio, sería necesario que
lo practicases una o dos veces al día, después de haber hecho tu meditación.
Lo más
importante sobre el dinero que necesitas entender, es que es un ser de energía,
está vivo.
Piensa en ello
como un elemento muy potente, un elemento muy importante.
Iba a decir que
probablemente es el elemento más importante en tu vida hoy. ¡Eso es debido a la
naturaleza del mundo que estamos viviendo! Sobre todo si vives en un país
occidental, donde es necesario tener dinero para sobrevivir.
El dinero te
permite hacer las cosas más básicas, tales como beber agua fresca, tener un
lugar donde vivir, tener ropa sobre tu cuerpo, ser capaz de expresarte de
manera creativa. Comer todos los días. Las cosas más básicas de la vida vienen
a través de usar el dinero, por lo tanto, es extremadamente importante.
Otro aspecto
del dinero que me gustaría que entendieras es que el dinero no es malo. Algunas
personas usan el dinero de una manera negativa, pero el dinero no tiene nada
negativo en sí mismo. Una vez que identificas y te conectas con la energía del
dinero, lo verás por ti mismo. No hay absolutamente nada negativo sobre el
dinero. Es inclusivo, creativo, enriquecedor. Es cálido, es hermoso. Y yo
quiero que seas capaz de experimentar esto.
Para este
ejercicio vamos a necesitar un poco de dinero para sostenerlo entre las manos.
Los billetes son mejores que las monedas, pero si no tienes ninguno por el
momento, la moneda será suficiente. Pero la próxima vez, trata de tener un
billete, y cuanto mayor sea, mejor.
Pon el billete
entre tus dos palmas de las manos, descansando suavemente en frente tuyo, como
si estuvieras rezando, pero tus manos descansando hacia delante, de modo que
estés en una postura agradable y confortable.
Es realmente
importante que mientras estás haciendo este ejercicio, no pidas cosas. He notado
cierta tendencia de cuando alguien entra en contacto con el dinero de
inmediato, o cuando siente que está empezando a contactarse con el dinero,
comienza a pedir cosas. Ya sabes, ‘Oh, yo quiero un coche nuevo, quiero un
nuevo trabajo, quiero dinero para comprar alimentos, lo que quiero… “- tú
sabes, no lo hagas.
Piensa en el
dinero como si fueras a quedártelo y a hacer un nuevo amigo, y si vas a hacer
un nuevo amigo, no vamos a empezar pidiéndole cosas. Lo que vamos a hacer, es
conocer la energía del dinero en primer lugar. Y luego, vamos a permitir que se
exprese en nuestro campo de energía. Eso es todo lo que vamos a hacer ahora.
Así que mantén
el dinero entre tus manos y tu mente clara.
A continuación,
vas a sentir el billete. Simplemente, siente el billete. Siente que está entre
las palmas de tu mano. Permite que esté allí, que sea. Pronto vas a empezar a
sentir calor. Siente la calidez encantadora que sale del billete. Esa es la
primera firma o señal que vas a identificar con el dinero. Es cálido.
Quiero que le
digas ‘hola’ y le digas que le permites que él se exprese en ti.
Y luego sólo
escucha.
Aquieta tu
mente y escucha.
Observa si
algunas imágenes o pensamientos vienen a tu mente, y permite que fluyan.
La primera vez
que yo hice esto, tuve una imagen de mi madre sacándome un billete que yo
sostenía en la boca, llevándome rápidamente al baño a lavarme la boca,
diciéndome lo sucio que era el dinero y que nunca debía ponerse el dinero en la
boca y que siempre debían de lavarse las manos después de tocar el dinero.
Obviamente me
sorprendió y causó un enorme bloqueo, porque no podía permitir dejar entrar el
dinero a mi vida, tú sabes, yo no podía permitir que el dinero, que estaba
sucio me tocase.
En realidad
estaba muy sorprendida cuando vi esa imagen, quiero decir, me había olvidado
completamente de esa imagen. Así que la agradecí, y se liberó.
Y si estás
recibiendo algún tipo de imágenes negativas de este ejercicio, lo que tienes
que hacer es simplemente dar gracias a la imagen, los sentimientos, los
bloqueos y ponerlos en libertad. Las imágenes vienen ahora para que puedas
ponerlas en libertad. Trabajé varios bloqueos a lo largo de unas cuantas
semanas. Finalmente, tuve la oportunidad de sentarme y permitir que el dinero
se expresase en mí.
Y la etapa
siguiente consiste en permitir que el dinero se exprese en tu campo de energía.
Tu campo de energía es tu vida, eres tú. Es tu cuerpo, son tus pensamientos,
tus emociones, tu realidad.
Una vez que
haya una buena retroalimentación positiva del dinero y estés permitiendo que se
exprese en ti total y absolutamente, quiero que le pidas que venga a tu vida.
Que entre en tu campo de energía.
Y yo puedo
decir que vas a ser muy feliz de hacerlo, porque al dinero lo que más le gusta,
es ser abundante en tu vida. Esa es la única forma en que puede expresarse –
siendo abundante, en todos los aspectos de tu vida.
Entonces, ¿cómo
se traduce en un nivel práctico? Básicamente, deja que el billete se vuelva
cálido entre tus manos.
Permite que se
caliente, permite que se caliente más aún. Permite que el calor crezca y te
abrace, para que entre en tu vida y fluya y florezca el amor de tu vida.
La firma que se
encuentra en el dinero es muy similar a la de la Madre Tierra porque son la
misma cosa. Dale la bienvenida, abrázalo.
Una vez que
hayas terminado, da las gracias al elemento del dinero por haberse expresado
plenamente contigo. Abre tus ojos si estaban cerrados, y deja el billete.
Recuerda, debes hacer este ejercicio por lo menos una vez al día.
Inelia Benz
©Ahava Iesu